¿Ya te has subido a la tendencia de Glass Skin? Si aún no, o si todavía no conoces que es esta técnica, te encuentras en el lugar indicado para conocer más. Esta tendencia en el cuidado facial, es originaria de Corea del Sur, y se ha extendido por todo el mundo, incluyendo España, donde cada vez más personas buscan obtener ese aspecto luminoso y sin imperfecciones que caracteriza a esta tendencia.

La Glass Skin se refiere a una piel tan lisa, uniforme y brillante que casi parece de cristal. Este acabado radiante no se logra sólo con maquillaje, sino a través de una meticulosa rutina de cuidado de la piel que incluye una hidratación profunda, exfoliación regular y el uso de productos específicos que potencian la luminosidad natural de la piel.

¿Cómo lograr la Glass Skin?

1. Limpieza doble: La base de cualquier rutina de cuidado de la piel, especialmente para obtener una Glass Skin, es la limpieza. La doble limpieza es un paso esencial que consiste en usar primero un limpiador a base de aceite para eliminar el maquillaje y las impurezas, seguido de un limpiador a base de agua para limpiar en profundidad los poros.

1. Exfoliación suave pero constante: Para obtener esa textura lisa característica de la Glass Skin, la exfoliación regular es clave. Esta elimina las células muertas de la piel que pueden opacar el rostro, revelando una piel más fresca y radiante. Se recomienda usar exfoliantes químicos suaves, como aquellos con ácido láctico o salicílico, que promueven la renovación celular sin irritar.

1. Tónico hidratante: Tras la limpieza, aplicar un tónico hidratante ayuda a equilibrar el pH de la piel y prepararla para absorber mejor los productos siguientes. Este paso es crucial para mantener la hidratación y la luminosidad.

1. Sérum con ingredientes activos: Un sérum adecuado es vital para tratar problemas específicos como manchas, líneas finas o falta de luminosidad. Ingredientes como la vitamina C, el ácido hialurónico y los péptidos son ideales para potenciar el brillo y la firmeza de la piel.

1. Hidratación profunda: La hidratación es quizás el paso más importante para lograr la Glass Skin. Se debe utilizar una crema hidratante que selle todos los productos aplicados previamente, asegurando que la piel mantenga su humedad y logre ese acabado brillante.

1. Protección Solar: Para mantener una Glass Skin perfecta, es imprescindible proteger la piel del daño solar. Un protector solar de amplio espectro previene la aparición de manchas y protege contra el envejecimiento prematuro.

Esta tendencia no solo se trata de estética, sino de cuidar la piel de manera integral, promoviendo la salud cutánea desde el interior para reflejar un exterior impecable. En un mundo donde el bienestar y la belleza están cada vez más entrelazados, la Glass Skin se posiciona como un estándar de belleza que prioriza una piel sana y radiante.